Monday, March 5, 2007






alheava – promessa

acção performativa e intervenção urbana

Obra realizada a partir de textos de Maria Zambrano

Apresentada no Salão Olímpico

no âmbito da mostra de artes performativas designada

quando um min«uto se arrasta

organizada por Carla Filipe



intervenção urbana

alheava e outros textos

realizada na Rua da Miguel Bombarda no Porto

(conhecida por ser a Rua das Galerias

e um dos pontos culturais da cidade).

foram inscritas a branco,

frases em português

retiradas do livro de Maria Zambrano,

“A METÁFORA DO CORAÇÃO E OUTROS ESCRITOS”

traduzidas por José Bento

para a editora Assírio & Alvim.



Maneira de apresentação de uma realidade que não pode fazê-lo de modo directo; presença do que não pode exprimir-se directamente,(...), única forma em que certas realidades podem tornar-se visíveis aos torpes olhos humano.

… em períodos como este da cultura ocidental, em que o visível é tão esmagador que some na sombra mais opaca o que com ela não concorda.

… tão pobre o reportório de «formas», de ideias ou crenças vivas e de metáforas poéticas

actuantes, e se consuma a vida em parcialidade tão mesquinha. … em períodos como este da cultura ocidental,…








acção performativa

alheava com mis mejores votos por la suerte y el futuro de Moçambique le envio mis mas cordiales saludos

realizada no Salão de bilhares

do Café Olímpico

participação de:

Carla Filipe (organizadora da mostra do evento)

Carla Cruz ( público)


Num primeiro momento a organizadora do evento, leu as

mensagens registadas

no provável telemóvel do artista. Pelas leitura destas, o publico tomou conhecime

nto que este não estaria presente e pela leitura

da totalidade das mensagens o publico ficou ainda a conhecer as ligações que o

autor estabelece com outras pessoas, colegas, amigos e familiares. Num

segundo momento a organizadora da mostra de performances convidou

duas pessoas do público a lerem dois textos de

Maria Zambrano, em tom de comunicado. O primeiro texto consistia numa carta

e o segundo num texto-ensaio, ambos escritos em castelhano foram lidos por portugueses.

Primeiro texto

La Piece, 5 de Junio de 1974

Sr. Don Joaquim de Montezuma de Carvalho

Distingido señor y amigo

Como vera, le envio las contestación a su encuesta agradeciéndole que se haya acordado de mi para algo que me es tán grato, que me interesa tán hondamente.

En este periodo de tinieblas Portugal nos oferece la flor de su claro despertar. Quiera el cielo que se logre esta hermosísima promesa.

Le agradezco tambien el interes con que me habla de mis publicaciones. Siempre es de agradecer encontrar un lector atento. Le envio pues, un ejemplar de un librito mio que amo especialmente.

Com mis mejores votos por la suerte y el futuro de Mozambique le envio mis mas cordiales saludos.

Maria Zambrano




Segundo texto


Antes que juicio alguno, tengo que expresar mi honda simpatía nacida de una doble fraternidad: la que se siente por todo País que se abre a la libertad con nitidez y alegria tanta, en modo al par mesurado y desbordante de entusiasmo, y la fraternidad con que la nación portuguesa ha despertado, y la afinidad que Portugal ha despertado siempre en mi. Las fronteras como se sabe, no responden siempre a diferencias sustanciales. Y sin pensamiento alguno de ignorar su existencia, la afinidad las transciende.

Mas no se trata simplemente de afinidad la que siempre he sentido junto con tantos españoles, respecto a Portugal. Creo que se trata de algo mas, de sentir y en parte saber de la existencia de grandes o pequeñas – que la cantidad no altera la esencia –

De modos de visión de la vida, de lo que se ha llamado filosóficamente “Concepcion

es del mundo,” que se extienden por encima de ciertas fronteras y que corren por debajo de todas las interrupciones y aun cortes, de la historia. Pues que la historia política y administrativa no deja de ser una construcción que muy a menudo se alza imperiosamente sobre las verdaderas corrientes de la vida. Que la historia aprisiona y hace esclava la vida de los hombres a quienes debería deservir como cauce – ya que el cauce es indispensable. Mas lejos de suceder as son mas bien raros los periodos de la historia en que el verdadero aliento vital, el alma diríamos y la permanente razón, clarean y así, cuando eso sucede, es como una alborada. Y alborada es esta aparecida el veinte e cínco de Abril en Portugal, tan hermana de aquella del catorce de abril de 1931 que trajo la tan amenazada y tan enseguida destruida Republica española. Llegadas en virtud de procesos diferentes, el rostro que en las dos asoma tiene diría, que idéntica nobleza, y que la misma mirada del hombre esperanzada, la misma cara de la libertad asoma en ellas.

Y el rostro de la libertad que el rostro mismo del hombre en los momentos nobles de su historia. E rostro del hombre que individualmente encuentra en todo momento por lóbrego que sea, modo de asomar y de dar de diversas maneras, testimonio de la condición humana, y casi siempre – como la misma etimología de la palabra “testigo” dice a través del martirio. Mas, que un pueblo todo ofrezca ese testimonio, muestre al mundo ese rostro de la humana nobleza conservada intacta, en estado creador, bajo un tan largo y duro cautiverio como vemos en Portugal ahora constituye un motivo del que bien necesitado el mundo anda: un motivo para mirarse en esa imagen real, de verse en ese claro espejo, de reencontrarse. Y es inútil decir que el atentar en cualquier forma contra un tal acontecimiento es atentar contra el hombre universalmente considerado.

- Tras de lo dicho ¿qué puedo añadir acerca del futuro de las hasta ahora colonias portuguesas? Este Futuro se dibuja muy claramente como presente, para Mozambique. ¿Cómo puede haber todavía Países sometidos a un régimen colonial sea cual sea el color de las pretendidas razones? El problema histórico de la colonización es el mismo que el del reino de la libertad, de la justicia y del sentido fraterno entre los hombres, que yo extendería al trato con el animal, con la planta, con el planeta mismo que habitamos. Es decir, el paso de la condición guerrera y conquistadora al sentirse y ejercer la humana condición como la de3 aquella criatura privilegiada y al par máximamente responsable de este trozo de la creación, de este universo que habitamos. Que pase el hombre de ser un tirano a ser un mediador. En civilizaciones lejanas como la antigua china y la egipcia faraónica el soberano se justificaba por ser el lugar, el punto exacto donde la acción del cielo recaia o en ser directamente hijo de un dios ordenador y activo. Las monarquías absolutas europeas no tuvieron nunca del todo esa concepción y el examinarlas no es cosa que quepa en estas cuartillas. Baste recordar que según la concepción liberal del estado, de la sociedad y del individuo, esta función mediadora recae sobre los hombres todos, mas de hecho restringida a una minoría formada mas que por nada, por la educación y la cultura, es decir por un permanente uso – habito inclusive que

viene a formar una segunda naturaleza. Mas, no se llegará a la verdadera democracia sino cuando cada uno de los hombres, sea cual sea su raza, su oficio, su condición social, se sienta ser ese mediador responsable ante todos los demas hombres y ante todos los seres vivos que le estan subordinados y ante las leyes del universo mismo. Y que el paso es arduo, que el camino es largo, enlaberintado, erizado de obstáculos, no quiere decir que ese no sea el único camino en que la historia toda puede desembocar.

Y solo me resta pues que enviar un saludo a estos Países que se encuentran en el difícil dintel de su libertad, de augurarles que sepan mantener esa impavidez necesaria, que no es impasibilidad, en esta hora de mayoría de edad reconocida historicamente. Lo que quiere decir de prestar oído al mismo tiempo a las exigencias de la hora y al pasado, a las exigencias de la hora y al pasado, a ese su pasado inmemorial del que tantas voces y signos y figuras pueden llegarle. A la despierta conciencia del presente ha de acompañar lo que con una expresión de un poeta español – Emilio Prados muerto en el exilio – llamo “memoria del olvido”

Maria Zambrano

La Piece.

Crozet-par-Gex.

France, Junio de 1974




Partindo da personagem do Sr. Joaquim de Montezuma de Carvalho;

alheava – promessa,

pretende tornar visível uma realidade vivida em Moçambique,

por alguns portugueses que lutaram pela independência da colónia.

Como se pode ler pelas palavras de Maria Zambran:

“En este periodo de tinieblas

Portugal nos oferece la flor de su claro despertar.

Quiera el cielo que se logre esta hermosísima promesa.”

esta necessidade de liberdade

era partilhada por muitos portugueses

nascidos em Portugal e ou em Moçambique

e por muitos outros que vivendo em Portugal

ou a viverem noutro país,

sonhavam e lutaram pela liberdade

acreditando que a revolução portuguesa

acontecida em 25 de Abril de 1974,

poderia traduzir-se num futuro melhor

para as antigas colónias

e para quem lá vivia.

Há ainda a referir

que as antigas colónias portuguesas,

antes e depois do processo de independência,

viveram a realidade da guerra

(guerra colonial e guerras internas).

As palavras afirmativas e desencantadas de Zambrano,

(inscritas nas rua das artes),

denunciam e confrontam-nos

com o estado actual da cultura ocidental .

Hoje, as palavras reflexivas,

mobilizadoras

e construtivas de Zambrano,

(dos textos escritos em castelhano

e lidos no Café – espaço outrora de discussão e confronto de ideias)

dificilmente encontram ouvintes

e

contudo

oferecem-nos muitas linhas de orientação

para pensar o tempo em que vivemos,

questionar o dito,

(re)pensar o feito

e contabilizar as falhas,

as perdas

e

sobretudo

responsabilizam-nos

pelo que faltou

e falta

empreender.